El Campeonato del Mundo de MotoGP recala esta semana en Silverstone con motivo del Gran Premio GoPro de Gran Bretaña en lo que supondrá un auténtico desafío para los neumáticos Michelin ante el reasfaltado del circuito después de la negativa experiencia del pasado año.
Silverstone volverá a poner a prueba su reasfaltado por segundo año consecutivo. No existen apenas referencias para preparar esta cita, ya que no se han celebrado test previamente antes del esperado fin de semana del GP.
El circuito de 5,900 metros, el más largo y uno de los más rápidos del calendario, ubicado en el corazón de la campiña de Northamptonshire, fue completamente renovado el año pasado, pero los problemas con el drenaje tras las fuertes lluvias del día de la carrera provocaron su cancelación y posterior reasfaltado.
Michelin preparó esta cita con una gama de 4 neumáticos slick delanteros y 4 traseros durante la asignación de pretemporada, que está permitida dentro de las reglas de MotoGP si no se ha probado en un circuito.
Esta gama incluye compuestos blandos, medios y dos versiones de compuestos duros para los Power Slicks de Michelin delanteros y traseros. Los compuestos delanteros medios y duros serán simétricos, mientras que los delanteros blandos y todos los traseros serán asimétricos, con un lado derecho más duro para gestionar las 10 curvas en esa dirección. Aunque hay 8 curvas de izquierda que hacen que el diseño del circuito sea casi simétrico, existe una mayor tensión y exigencia en el lado derecho de las gomas.
Como quedó acreditado la pasada temporada, la lluvia es previsible en cualquier momento de un verano británico, por lo que la gama de neumáticos Michelin Power Rain podría entrar en acción fácilmente. La asignación incluirá neumáticos delanteros blandos y medios simétricos, con traseros blandos y medios asimétricos, y el lado derecho más duro, al igual que los slick.
Fuente: Portal automotriz